TEORÍAS DEL POBLAMIENTO DE AMÉRICA

ACERCAMIENTO A LAS TEORÍAS DEL POBLAMIENTO AMERICANO

El poblamiento de América es un tema de larga discusión, pues existen múltiples ideas o teorías que intentan explicar quiénes fueron, cómo, cuándo y por dónde llegaron los primeros pobladores. Dichas teorías parten de evidencias que dan cuenta de la presencia de los humanos en el continente, como los hallazgos de restos fósiles humanos, de los cuales se extraen muestras de ADN (mitocondrial) para entablar relaciones genéticas. Los hallazgos de artefactos de piedra hechos por los humanos de aquellas épocas son otras de las evidencias importantes para identificar la presencia de hombres y mujeres. Básicamente es toda la información con la que se puede contar de la vida del hombre y la mujer prehistóricos.

LAS DIVERSAS TEORÍAS DEL POBLAMIENTO DE AMÉRICA

Las teorías del poblamiento de América se pueden dividir por temporalidad: una que sugiere que la entrada del humano fue relativamente reciente, conocida como teoría del poblamiento tardío o consenso Clovis, y otras que opinan que fue más temprano o teoría pre-Clovis. En ambos casos, sugieren que los hombres y las mujeres arribaron desde Asia, ya sea por tierra o por migraciones marítimas, siguiendo la línea costera del Pacífico, aunque también existe una hipótesis que propone que los primeros pobladores pudieron llegar de Europa por medio de la navegación del océano Atlántico.

La teoría del poblamiento tardío o consenso Clovis fue predominante y la más aceptada dentro del debate sobre el poblamiento americano hasta hace unas décadas, cuando nuevos hallazgos comenzaron a refutar su propuesta. Esta teoría sostiene que grupos de cazadores-recolectores, procedentes de Asia, ingresaron a América hace unos 14 000 a 13 500 años por el estrecho de Bering, a través de un puente terrestre que se formó producto del descenso del nivel del mar (120 metros aproximadamente) debido al congelamiento de las aguas, permitiendo conectar la actual Siberia con Alaska. Esta región fue conocida como Beringia. En el norte del continente existía un enorme glaciar que cubría prácticamente todo lo que hoy es Canadá, pero al terminar la Era del Hielo, y el aumento de temperatura, el glaciar empezó a retroceder y se formó un corredor libre hace 13 400 años, que separó en dos a esta gran capa helada. A través de ese corredor, los humanos alcanzaron la zona de las grandes llanuras norteamericanas. Con ellos, surgiría la primera cultura del continente, la Clovis (llamada así por los artefactos de piedra encontrados inicialmente en la localidad de Clovis, Nuevo México, Estados Unidos), la cual se distribuyó en prácticamente todo el actual territorio de Estados Unidos y el norte y centro de México. Esta teoría sustenta que todos los pueblos originarios de América descendían de la cultura Clovis

Con el paso de los siglos y el continuo aumento de la temperatura, los glaciares terminarían desapareciendo (hace 10 000 años), trayendo consigo el aumento del nivel del mar y la separación de Beringia en dos: la parte siberiana en Asia y la región de Alaska en América. Esto ocasionó que las posteriores civilizaciones del continente americano quedaran aisladas y sin influencia de Eurasia, hasta la llegada de los conquistadores españoles en el siglo XV.

La teoría del poblamiento temprano o pre-Clovis cuestiona el poblamiento tardío del continente y la idea de que la cultura Clovis fuese la primera en América a partir de un conjunto de estudios y hallazgos arqueológicos con fechamientos anteriores a 14 000-13 500 años. Según esta propuesta, los primeros habitantes de América pudieron haber salido de la península de Kamchatka (Rusia), atravesando las islas Aleutianas (Alaska) y circunnavegando la costa pacífica en una o varias migraciones sucesivas, evitando el enorme glaciar continental y poblando inicialmente las zonas costeras, hasta alcanzar Sudamérica. De esta forma, se explicaría la presencia humana en América antes de la apertura del corredor libre de hielo hace 13 400 años. 

Esta migración por la ruta costera pacífica tiene cada vez más aceptación. Cabe señalar que investigaciones arqueológicas en Australia, Melanesia y Japón indican que ya se empleaban barcazas o botes allí en periodos tan lejanos como 40 000-25 000 años. La ruta marina habría proporcionado una mayor variedad de recursos alimenticios y una movilidad más eficiente que las rutas terrestres, ya que muchas áreas costeras estuvieron libres de hielo. Sin embargo, muchos sitios costeros potenciales están ahora sumergidos, lo cual hace la investigación difícil.

Un elemento a favor de esta teoría ha demostrado que el corredor libre de hielo en Norteamérica se abrió entre 1 000 y 2 000 años después de las primeras evidencias de asentamiento humano en América y que, por lo tanto, existió una migración anterior. La llegada de hombres y mujeres a América atravesando el Pacífico desde Melanesia o Australia, bordeando los hielos de la Antártida, o inclusive desde Europa y Groenlandia bordeando el Atlántico, no pueden ser descartadas. No obstante, la ruta circumpacífica parece la hipótesis más probable para explicar el poblamiento temprano. 

Finalmente, otras teorías sugieren rutas de migración alternas: por ejemplo, a través de las islas de la Melanesia y Polinesia (pequeñas islas en el océano Pacífico) por medio de balsas primitivas, o desde Europa por el océano Atlántico a través de hielos flotantes hasta alcanzar la costa este de Estados Unidos. Esta última se basa en las similitudes entre las puntas de la cultura Clovis y las de la cultura Solutrense en Francia y España (hace aproximadamente 22 000 y 18 000 años).

Este panorama de las diversas teorías del origen del poblamiento de los hombres y las mujeres en América sugiere que posiblemente existieron distintas rutas, así como distintas migraciones y que no solamente se llegó por un solo camino, ni por un solo grupo, los cuales entraron al continente hace 30 000 a 15 000 años.

Fuente: Colección Ximhal. Ética, naturaleza y sociedades. Primer grado de secundaria. Dirección General de Materiales Educativos de la Secretarla de Educación Pública.